L’école comienza a fraguarse en el transcurso del 2018, planificando y haciendo tangible todas las ideas que se han acumulado y asimilado a lo largo de 10 años de profesión, de viajes y aprendizajes por más de ocho denominaciones de origen y multitud de lugares.
Todo ello se complementa, al unísono, con la formación académica en enología y viticultura.Diez años antes, en el 2008, conocimos al respetado enólogo y profesor, Joan Milá, siendo aprendices y segundos de a bordo de uno de sus tantos proyectos. Él nos hizo asimilar la idea de saber que había tantos vinos diferentes como lugares y variedades, y que entrar en el juego de trabajar con vocación en este mundo, significaba dedicación, tenacidad y movimiento, que la enología sería tanto más hermosa cuanto más dinámica fuese.
Entusiasmados por sus experiencias y conocimientos, iniciamos un camino largo y emocionante que nos llevará por lugares tan maravillosos y tan vitivinícolas como, Penedés y Terra alta, otros más desconocidos y más desarrollables como Granada, Calatayud, Costers del Segre o Ribera del Guadiana y algunos más extensos como La Mancha o Jerez, concretándose un punto de inflexión a inicios del 2013, con la maravillosa revelación de las idiosincráticas comarcas del Priorat-Montsant en Tarragona.
Aún recordamos el momento de adentrarnos en aquel paraíso enológico, donde los días pasaban, con tan solo viñedos en grandes pendientes colmando la vista y elaboradores de vino persiguiendo el sueño de los tan valorados como Palacios, René o la familia Pérez, con los que tuvimos la suerte de cohabitar en aquel lugar creado al detalle y para el disfrute de este hermoso trabajo.
Un lugar incomparable, inolvidable donde de la mano de uno de los mejores viticultores de la zona y de grandes autores, nuestro actual maestro, Lluís Miró, entendimos que la mejor herramienta para obtener la mejor uva era practicar el sentido común en la lectura de los parajes. Visitar con Lluís un viñedo, era aprender a asimilar el pasado, presente y futuro del potencial de su fruto, algo tan mágico como viajar en el tiempo.
El paso por Priorat-Montsant, que se extendió hasta finales del 2016, nos encaminó definitivamente a querer ser autores de vino y nuestros propios viticultores a pie de campo, moldeándonos para crear por nosotros mismos; al igual que hicieran en parís (permítannos la licencia), en tiempos de entreguerras, los componentes de la famosa “L’école de París”, crecer creando; nos presentamos con la añada L’école 2019, con unos vinos que son el resultado de nuestra propia y humilde escuela.